En el aire se dibujaba el segundo tropiezo en casa para Xolos y el primer triunfo para Rayados de visita, pero una maniobra magistral de Riascos cambió la historia, y le dio un respiro al cuadro Campeón de México.
Monterrey estaba por firmar otro campanazo en el Estadio Caliente, hasta que a tres del final Duvier marcó una joya semicircense que representó el 2-2 e hizo explotar el Estadio Caliente, y deja en el aire un regreso a zona afortunada de los Regios.
La Pandilla estaba haciendo la tarea dominando a los Xolos y poniéndolos abajo en el marcador con una voltereta encabezada por Suazo y De Nigris, pero otra vez su defensa falló a la hora afortunada para evitar que escalara momentáneamente hasta el sexto general.
Aún así puede hablarse de un resultado productivo para ambos cuadros, tomando en cuenta la dificultad de la plaza tijuanense, y el poco tiempo que tuvo Xolos para recuperarse de su viaje a Brasil de media semana, cerrando con un gran partido la jornada sabatina de la fecha 11.
Con el resultado, el cuadro canino llegó hasta 17 puntos defendiendo su posición clasificatoria, mientras que los albiazules llegaron a 14 unidades en el puesto 10, tan cerca de pintar un torneo positivo como de caer a los puestos de rezago.
La aventura en Brasil obligó a Mohamed a dosificar su cuadro para enfrentar el compromiso, y Xolos saltó al campo guardando a elementos como Alfredo Moreno y Joe Corona, ante unos regios que salieron a dar uno de sus mejores partidos de visita en el año, pero insuficiente para ser consistentes 90 minutos.
Fueron los de casa los que encontraron la meta primero en el partido, ya que en una melé en el área rayada Arce se avivó y luego de tibios despejes metió un centro medido a la cabeza de Fidel Martínez, quien saludó el 1-0 al 26′ desbordando la algarabía de la afición.
Pero Monterrey había dado esbozos de solidez en el campo, y respondió rápido para el 1-1, en una descolgada de Suazo que filtró perfecto para la entrada de Aldo de Nigris, quien soportando la carga controló y venció a Saucedo de pierna zurda, en el 1-1 apenas al 31′.
El momento era albiazul y al 34′ Suazo orquestó la voltereta, al cobrar un tiro libre que iba a gol, Riascos alcanzó a rozar en el área, y la pelota se anidó tras un bote a primer palo, para el 2-1 que puso nerviosismo en el lugar.
La Pandilla no renunció al frente y tuvo varias para poner el 3-1, pero no definió atinadamente y navegó con la mínima ventaja teniendo como enemigo al reloj.
Para el complemento fue Xolos el que salió más resuelto a tener el resultado, y Rayados fabricó la trampa para buscar el tercero, sólo que nunca logró asociar sus piezas para crear verdadero peligro.
Aún así el cuadro de Vucetich tuvo en sus manos el triunfo virtual al 82′, cuando Suazo dejó solo a Zavala mano a mano con Saucedo, pero el contención perdonó al definir demasiado cruzado, desperdiciando la jugada que mataba en el marcador y probablemente en lo anímico.
Fue así que Xolos, ya con Moreno y Corona en el campo, y enfrentando a unos regios que ya defendían con los ingresos de Leo López y “Tepa” Solís, acosó el área albiazul hasta que logró emparejar las cifras.
La jugada afortunada llegó al 87′, cuando Alfredo Moreno puso un centro frontal a la media luna, donde Riascos bajó con el pecho, amagó a la zaga y cuando el balón se le iba se lanzó barrido para empalmar la pelota a primer poste, logrando vencer a Orozco en el 2-2 que se festejó con todo.
Rayados intentó rescatar el juego sobre la hora, pero fue sorprendido con el silbatazo final, que lo deja aún sin definir el calificativo para su torneo, vivo para la calificación, pero sin terminar de perfilarla con resultados.
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