(Reuters) – La Asamblea General de Naciones Unidas condenó el martes por vigésimo cuarto año el embargo comercial de Estados Unidos sobre Cuba, en una resolución en la que Washington votó en contra, pese a una mejora en sus relaciones y una iniciativa del presidente Barack Obama para acabar con las restricciones económicas.
La resolución -que no es vinculante- fue adoptada con el voto a favor de 191 de los 193 miembros de la Asamblea General. Israel se unió a su aliado Estados Unidos en el voto negativo.
En julio, Estados Unidos y Cuba restauraron sus relaciones diplomáticas tras un ruptura de 54 años. Obama dio pasos para aliviar el embargo y las restricciones de viaje a Cuba, pero solo el Congreso puede levantar por completo la medida.
Obama dijo el mes pasado a la Asamblea General de la ONU que estaba “seguro de que nuestro Congreso inevitablemente levantará un embargo que no debería estar más vigente”.
El único cambio que presenta la resolución es la bienvenida que da a los renovados vínculos y el reconocimiento a “la voluntad expresa” de Obama de poner fin al embargo.
“El texto se queda corto al reflejar los significativos pasos que se han dado y el espíritu de compromiso liderado por el presidente Obama”, afirmó Ronald Godard, asesor para asuntos del Hemisferio Occidental, antes de la votación.
“Si Cuba piensa que este ejercicio ayudará a hacer que las cosas progresen en la dirección que ambos gobiernos indicaron que desean, está equivocada”, dijo Godard a la Asamblea General, agregando que la iniciativa fue “desafortunada”.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, aseguró que el embargo es “una violación flagrante, masiva y sistemática de los derechos humanos de todos los cubanos”.
“Compartimos la esperanza de que el Congreso de los Estados Unidos avance hacia el cambio de una política ineficaz, anclada en el pasado, cruel e injusta”, señaló. “Mientras el bloqueo persista, seguiremos presentando el proyecto de resolución”, agregó.