Líderes religioso demandaron hoy al gobierno de Estados Unidos ampliar las protecciones de conciencia ante al mandato de la ley de salud que obliga a empleadores a proveer cobertura de aborto a sus trabajadores.
A decir de estos líderes, el mandato, el cual ha sido ya objeto de más de medio centenar de demandas civiles, representa “la violación más profunda por parte del gobierno federal a los derechos de la conciencia”.
“La directiva del HHS (Departamento de Salud y Servicios Humanos) es coactiva y coloca a la administración en la posición de definir o dejar a un lado la doctrina religiosa y esto debería preocupar a los estadunidenses”, señaló la misiva.
Aunque la ley exime de este mandato a entidades como la Iglesia católica o instituciones religiosas, lo mantiene para entidades con fines de lucro manejadas por grupos religiosos, particularmente instituciones educativas.
La ley impone multas económicas y sanciones legales para las organizaciones y empresas que no cumplan con este apartado de la Ley Asequible de Salud aprobada por el Congreso en 2010.
El arzobispo William E. Lori, de la Diócesis de Baltimore, dijo que la carta es un reflejo de la coincidencia que existe entre la mayoría de los grupos religiosos del país en cuanto a que este mandato es atentatorio de la libertad religiosa.
“Otros signatarios que no comparten nuestra puntos de vista sobre anticonceptivos y probablemente están en desacuerdo con nosotros en otras cosas, entienden que lo que está aquí en juego es la libertad religiosa”, dijo.
En conferencia de prensa con otros lideres religiosos, Lori dijo que mientras el gobierno mantenga está oposición la iglesia, a través de la Conferencia de Obispos Católicos, “continuará buscando un alivio por parte de las cortes y el Congreso”.
Russell D. Moore, presidente de la comisión de libertades religiosas y ética de la Convención Bautista del Sureste dijo que el objetivo de la carta va más allá de las convergencias religiosas de los firmantes.
“Una de las razones por las que nos oponemos a está clase de intrusión en el libre ejercicio (de la religión) es que no queremos ser oprimidos ni que se oprima a otros”, dijo en la conferencia de prensa.
En su carta, los firmantes piden al HHS a que “por lo menos amplíe las protecciones de conciencia bajo el mandato para cubrir cualquier organización e individuo que tenga objeciones morales o religiosas” para cubrir este servicio.
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