Seudoaficionados del Monterrey no se conformaron con gritar los goles de su equipo en el remodelado Estadio Cuauhtémoc, la casa que hasta hace poco era la peor pesadilla de Rayados, porque en 20 años nunca ganó La Pandilla.
Integrantes de la Barra La Adicción, prendieron fuego en la zona donde se ubicaban cuando el partido estaba empatado a un gol, pedazos de las butacas fueron lanzados al terreno de juego; después de finalizado el encuentro a favor de los regios 3-1, varios asientos lucieron destruidos.
En redes sociales, esta acción ha sido recriminada no solo por afición poblana, también de seguidores de otros equipos e incluso de Rayados, quienes desaprueban lo hecho por esta barra, subrayando que esto es “delincuencia” y “falta de educación”.
“¿Qué pensarían los #Rayados si una afición rival va y quema butacas de su “flamante” nuevo estadio?, publicó el aficionado @paqotorres; hasta el momento, el inmueble regio no ha sufrido daños.
[MEDIOTIEMPO]