Este jueves, la dirigencia del Guadalajara recibió en el Estadio Omnilife a los líderes de los grupos de animación, a petición de los mismos, con el fin de resolver las diferencias que existen entre ambas partes y que ha afectado los intereses de los barristas.
Diez representantes de dichos grupos se encontraron con Dennis Te Kloese, Director Deportivo de Chivas; Julio Reyes, Director Administrativo; Pedro Lobato, Jefe de Seguridad del Omnilife; el técnico de Chivas, Benjamín Galindo, el Capitán Héctor Reynoso, así como Gerardo Nolasco, enlace entre la dirigencia de Chivas y los grupos de animación.
Las principales conclusiones a las cuales llegaron, fue que Chivas limitó la cantidad de boletos que les venderá a dichos grupos. Anteriormente, se les vendían 3 mil boletos, ahora se les limitó a mil 50 entradas.
Se determinó que volverán a ocupar la zona en la que se ubicaban anteriormente, pero se mantendrá embutacada y deberán pagar sus boletos sin descuento, como cualquier otro aficionado. Las barras se comprometieron a conservar dichos lugares en buen estado.
Otro de los puntos clave en la reunión, fue que se acordó que se realizará una nueva credencialización para los integrantes de estos grupos. Para ello, será necesario presentar una carta de Policía, en la cual conste que no hay antecedentes penales. También se digitalizará la huella digital de los miembros de las barras, y así tener un mejor control de éstos. Esta credencialización se llevará a cabo del 21 al 24 de marzo.
RECONOCIERON AUSENCIA
En la reunión, tocó turno a Héctor Reynoso y Benjamín Galindo para dar su opinión y mediar entre las dos partes. En primera instancia, el Capitán del Guadalajara aceptó que en el encuentro del pasado domingo, ante los Tuzos del Pachuca, se sintió la ausencia de dichos grupos de animación y el plantel lo resintió.
En tanto, el técnico de Chivas les solicitó que el aliento hacia el Guadalajara fuera incondicional, y también pidió que no le den la espalda al equipo, pues en algunas ocasiones terminan apretándolo, cuando entonan en particular un canto donde exigen que “pongan huevos” a los jugadores, situación que desagrada a Galindo Marentes.
Además, la Secretaría de Seguridad del Municipio de Zapopan informó que utilizarán una torre hidráulica de seguridad para ubicar, desde las alturas, conflictos en los alrededores del Estadio Omnilife.
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