El gobierno municipal de Apatzingán no está en favor ni en contra de ningún grupo de autodefensa, ni tampoco de grupos identificados con la delincuencia, afirmó el presidente municipal, Uriel Chávez Mendoza, al negar que durante y después de los acontecimientos violentos abandonara el municipio; de la misma forma señaló que no pedirá aumentar su escolta de seguridad pues no ha recibido ningún tipo de amenaza y se encuentra sin temor y en paz para seguir al frente de la Presidencia de Apatzingán.
Luego de una semana que los elementos de Seguridad Pública estuvieron desarmados y sin unidades para realizar operativos en la ciudad, ayer, el Ejército Mexicano entregó las armas a la Dirección de Seguridad Pública; en ese tenor, Uriel Chávez Mendoza aclaró que en ningún momento los integrantes de Seguridad Pública fueron desarmados por la fuerza, por el contrario, la XLIII Zona Militar informó con anticipación que se estarían resguardando las armas.
En entrevista, el presidente municipal anticipó que la próxima semana estará en esta ciudad el gobernador del estado, Fausto Vallejo Figueroa, de quien aseguró que ha estado en constante comunicación con el alcalde para conocer la situación que prevalece en la ciudad; no obstante, dijo que durante la visita del gobernador se aprovechará para exponer necesidades como la falta de recursos para generar derrama económica.
El presidente de Apatzingán confió en que en breve la ciudad volverá a mantenerse tranquila: “No dudamos que los apatzinguenses puedan recuperarse de lo que ha venido a incomodar a toda la población”, explicó al exhortar a los ciudadanos a que contribuyan a no generar psicosis y miedo entre familiares y amigos, pues dijo que “lamentablemente, los medios de comunicación nacionales satanizan el municipio y muchas veces no está ocurriendo nada grave, pero la gente se deja guiar por lo que se dice”, precisó.
Por otra parte, el edil refirió que en el municipio no basta con que el gobierno federal mande elementos del Ejército Mexicano y la Policía Federal, también se requieren programas de apoyo para la población, sobre todo, dijo, porque en estos momentos no hay derrama económica, los negocios están cerrando y la ciudadanía se queda sin empleo.
En ese sentido, Uriel Chávez Mendoza coincidió en que todos los sectores de la sociedad están lacerados por la inseguridad e inestabilidad social, pero se confía en que con el apoyo del gobierno estatal y federal se podrá recuperar la ciudad prospera que antes era Apatzingán.
